Equipo Amateur cantera Real Madrid 1955

La Temporada 1955-1956 del Real Madrid Amateur: Un Año de Gloria y Proyección

La década de 1950 fue un periodo de oro para el Real Madrid C.F., no solo por sus éxitos a nivel profesional, sino también por el trabajo realizado en su cantera. Durante la temporada 1955-1956, el equipo Amateur del club madrileño tuvo una actuación destacada, consagrándose campeón del Grupo 2 de la Copa Ramón Triana. Bajo la dirección de José Morales Berriguete «Moleiro» como preparador y con el respaldo del médico Prudencio Sánchez Fernández «Pruden», este grupo de jóvenes talentos mostró un desempeño excepcional tanto a nivel regional como internacional.

La Función del Equipo Amateur en el Real Madrid

El equipo Amateur del Real Madrid en la década de 1950 era una pieza fundamental en la estructura del club. Sirvió como un espacio de desarrollo y formación para jóvenes promesas que, en muchos casos, luego llegarían a formar parte del primer equipo. A diferencia de los equipos juveniles, donde el objetivo principal era enseñar los aspectos básicos del juego, el equipo Amateur estaba enfocado en preparar a los jugadores para la competencia de alto nivel.

Moleiro, con su experiencia y liderazgo, supo aprovechar el talento que tenía a su disposición. Jugadores como Juan Vísa Gelabert, Ángel Salazar Docando, Eduardo Chicharro Calleja, Ignacio Martín-Esperanza Tejada, Juan Santisteban Troyano, Antonio Ruiz Cervilla, Fernando Fernández Cecilia, Vicente Baena Camarero, Pedro Casado Buchó y Nicolás de Las Heras Moreno fueron algunos de los nombres que brillaron durante esta temporada. Muchos de estos futbolistas, aunque jóvenes, demostraron que tenían el potencial para convertirse en figuras importantes en el panorama futbolístico español.

La Conquista del Grupo 2 de la Copa Ramón Triana

Uno de los grandes logros del equipo Amateur del Real Madrid en la temporada 1955-1956 fue la conquista del Grupo 2 de la Copa Ramón Triana. Este torneo, de gran tradición en el fútbol regional, reunía a los mejores equipos amateurs de la zona, lo que aumentaba el nivel de competencia y la exigencia para los participantes. El Real Madrid demostró su poderío desde el inicio del torneo, imponiéndose en cada partido gracias a un fútbol organizado y efectivo.

El equipo, liderado en el campo por jugadores de gran calidad como Santisteban y Ruiz, mostró una gran cohesión y entendimiento. La defensa, compuesta por jugadores como Calleja y Martín-Esperanza, se mantuvo sólida, mientras que el mediocampo controlaba el ritmo de los encuentros, distribuyendo el balón con inteligencia y abriendo espacios para los delanteros. La versatilidad del equipo permitió que jugadores como Baena y Casado destacaran en ataque, aportando tanto goles como asistencias.

Un Mediocampo Sólido y Creativo

El éxito del equipo Amateur en la Copa Ramón Triana se debió en gran parte a la solidez y creatividad de su mediocampo. Juan Santisteban Troyano, un joven prometedor con gran visión de juego, fue uno de los pilares fundamentales en esta zona del campo. A su lado, Antonio Ruiz Cervilla aportó equilibrio, permitiendo que el equipo mantuviera la posesión del balón y dictara el ritmo del juego.

La combinación de estos dos jugadores permitió que el Real Madrid dominara a sus rivales, ya que ambos tenían la capacidad de recuperar el balón y lanzar ataques rápidos con pases precisos. Santisteban, con su capacidad para filtrar pases entre líneas, fue una amenaza constante para las defensas contrarias, mientras que Ruiz se encargaba de barrer cualquier intento de contraataque del rival. Esta dupla fue clave para el éxito del equipo durante toda la temporada.

Defensa Inquebrantable

En la defensa, el Real Madrid Amateur también destacó por su solidez. Eduardo Chicharro Calleja y Ignacio Martín-Esperanza Tejada formaron una pareja central que impuso respeto a lo largo de la temporada. Ambos jugadores, con una gran capacidad de anticipación y excelente lectura del juego, fueron fundamentales para mantener al equipo firme en la parte trasera.

Calleja, con su experiencia y liderazgo en la defensa, organizaba a sus compañeros y aseguraba que el equipo mantuviera una línea defensiva compacta. Martín-Esperanza, por su parte, se destacó por su capacidad de sacar el balón desde atrás con calidad, iniciando jugadas que permitían al equipo transitar de la defensa al ataque con fluidez. Junto a ellos, el portero Juan Vísa Gelabert también tuvo actuaciones destacadas, demostrando seguridad bajo los palos y realizando paradas cruciales en momentos decisivos de los partidos.

El XX Torneo Internacional de Ginebra

Uno de los eventos más importantes de la temporada para el equipo Amateur fue su participación en el XX Torneo Internacional de Ginebra, que se celebró en abril de 1956. Este torneo, organizado por el club Servette de Suiza, era uno de los más prestigiosos a nivel internacional para equipos no profesionales. Equipos de la talla del Inter de Milán, el Torino y el Anderlecht participaron en esta edición, lo que representó un reto formidable para los jóvenes del Real Madrid.

El torneo se estructuró con partidos de dos tiempos de 25 minutos cada uno, lo que requería un enfoque táctico muy específico. Aunque no se conocen los resultados exactos de los partidos, se sabe que el equipo Amateur del Real Madrid mostró un gran nivel, compitiendo de igual a igual contra algunos de los mejores equipos de Europa.

Entre los jugadores que participaron en el torneo se encontraban nombres como Visa, Calleja, Carrasco, Santisteban, Sutter, Ruiz, Casado, Fernández, Baena, Lamorena y Las Heras. Estos jóvenes tuvieron la oportunidad de medirse ante futbolistas de gran calibre, lo que no solo les sirvió como experiencia internacional, sino que también les permitió entender las exigencias del fútbol a un nivel superior.

El Desarrollo Táctico del Equipo

El Real Madrid Amateur, bajo la dirección de Moleiro, se caracterizó por su versatilidad táctica. El equipo podía adaptarse a diferentes tipos de rivales, ya fuera dominando la posesión o apostando por ataques rápidos. En los torneos regionales, donde los equipos solían jugar de manera más física, el Madrid aprovechó su superioridad técnica para controlar los partidos desde el mediocampo.

En el Torneo de Ginebra, enfrentándose a equipos europeos más experimentados, el equipo se enfocó en mantener una defensa sólida y aprovechar las oportunidades en el contraataque. Moleiro era consciente de que el margen de error era menor en este tipo de competencias, por lo que preparó a sus jugadores para enfrentarse a situaciones de alta presión.

La Influencia de Moleiro y Pruden

El éxito del equipo Amateur no habría sido posible sin la figura de José Morales Berriguete «Moleiro». Como preparador, supo sacar lo mejor de cada jugador, no solo en el aspecto técnico, sino también en lo psicológico. Moleiro fomentó un ambiente de competitividad sana, donde cada futbolista entendía su rol dentro del equipo y trabajaba al máximo para mejorar día a día.

Por otro lado, el médico del equipo, Prudencio Sánchez Fernández «Pruden», jugó un papel crucial en mantener a los jugadores en óptimas condiciones físicas. Las competiciones en las que participó el equipo fueron muy exigentes, por lo que el cuidado médico fue fundamental para evitar lesiones y asegurar que los futbolistas pudieran rendir al máximo nivel. La sinergia entre el trabajo de Moleiro y Pruden fue una de las claves del éxito del equipo a lo largo de la temporada.

Impacto a Largo Plazo

La temporada 1955-1956 dejó un legado importante en la historia del equipo Amateur del Real Madrid. No solo por los títulos y logros obtenidos, sino también por la experiencia acumulada por los jugadores que participaron en ella. Muchos de estos futbolistas continuaron sus carreras en el fútbol profesional, ya sea en el Real Madrid o en otros equipos de la liga española.

Jugadores como Juan Santisteban, Pedro Casado y Vicente Baena llegaron a tener carreras destacadas, gracias en parte a la formación que recibieron en el equipo Amateur. Estos futbolistas, que aprendieron los valores del club desde jóvenes, representaron al Real Madrid con orgullo y demostraron que la cantera del club seguía siendo una fuente inagotable de talento.

Conclusiones

La temporada 1955-1956 fue un año de crecimiento y éxito para el equipo Amateur del Real Madrid C.F.. Bajo la dirección de Moleiro y con el apoyo de Pruden, este equipo no solo logró triunfos a nivel regional, sino que también dejó su huella en competiciones internacionales como el Torneo de Ginebra.

1955-1956 Real Madrid Amateur

Arriba, x (Portero suplente), MARTÍN-ESPERANZA (Ignacio Martín-Esperanza Tejada), CASTROVIEJO, CALLEJA (Eduardo Chicharro Calleja), BAENA (Vicente Baena Camarero), SANTISTEBAN (Juan Santisteban Troyano), SALAZAR (Ángel Salazar Docando)

Abajo, BENEYTO (Luis Miguel Beneyto Azpiroz), CARRASCO (Octavio Carrasco Navarro), RUIZ (Antonio Ruiz Cervilla), FERNÁNDEZ CECILIA (Fernando Fernández Cecilia), LAS HERAS (Nicolás de Las Heras Moreno)

1955-1956 Real Madrid Amateur, 10/05/1956, Madrid (nuevo de la Federación), Final de la Copa Ramón Triana, vs AGROMÁN C.F.
Arriba, Sr. Gómez (masajista), VÍSA (Juan Vísa Gelabert), LAFUENTE (Celestino Ruiz de la Fuente), CALLEJA (Eduardo Chicharro Calleja), SANTISTEBAN (Juan Santisteban Troyano), CARRASCO (Octavio Carrasco Navarro), MARTÍN-ESPERANZA (Ignacio Martín-Esperanza Tejada)
Abajo, SUTTER (Carlos Sutter Acosta), FERNÁNDEZ (Fernando Fernández Cecilia), RUIZ (Antonio Ruiz Cervilla), BAENA (Vicente Baena Camarero), CASADO (Pedro Casado Buchó)