Temporada Amateur 1958-59

La temporada 1958-1959 del Real Madrid Amateur

El equipo y su estructura

La temporada 1958-1959 fue una etapa significativa para el equipo Amateur del Real Madrid. Bajo la dirección de José Morales Berriguete «Moleiro», el conjunto contaba con un sólido cuerpo técnico. Prudencio Sánchez Fernández «Pruden», como médico, y Gómez, como masajista, formaron parte esencial de la estructura del equipo. Además, el apoyo logístico recayó en Miguel Malbo Notario, delegado del fútbol juvenil y amateur.

El equipo participó en la prestigiosa Copa Ramón Triana, donde alcanzó el subcampeonato. Esta actuación marcó un importante logro dentro del contexto competitivo de la época y consolidó al Real Madrid Amateur como una cantera de talento en desarrollo.

La plantilla: talento y versatilidad

El equipo contaba con una plantilla diversa y equilibrada, que incluía jugadores prometedores en todas las posiciones. Los porteros, Justo Rodríguez y Estanislao Pereira, brindaron seguridad en la meta, demostrando reflejos y liderazgo bajo los tres palos.

En la línea defensiva, figuras como Celestino Lafuente, Julián Montero, José Sancho García y Antonio Alonso Imaz «Marquitos II» destacaron por su capacidad para anticipar jugadas y mantener la solidez del equipo. Junto a ellos, jugadores como Escribano ofrecieron consistencia y sacrificio.

El mediocampo estuvo liderado por futbolistas como José Luis Lamata Gómez, Juan Antonio Quirós, y José Antonio Roth Romero, quienes combinaron creatividad y esfuerzo defensivo. Otros mediocampistas, como Manuel Buján Álvarez y Juan José Laso Rhodes, complementaron la estructura táctica con su visión y control del balón.

La delantera, por su parte, fue una de las líneas más destacadas. Jugadores como Antonio Gento López «Gento III», Luis Ribada Martín, y Roberto Herrera Alonso «Herrera II» aportaron goles y velocidad al ataque. También figuraron en esta posición José Antonio Lozano Alcázar, José Sánchez-Cabezudo Camacho, y Juan Manuel Villa Gutiérrez, quienes ofrecieron alternativas estratégicas. El ataque se completó con la participación de futbolistas como Joaquín Lara Navarro, Ángel López Téllez, y Bonilla.

El camino al subcampeonato

La Copa Ramón Triana reunió a algunos de los equipos más competitivos de la categoría amateur. El Real Madrid Amateur, liderado por «Moleiro», mostró un fútbol dinámico y comprometido. A lo largo de la competición, el equipo destacó por su capacidad para adaptarse a diferentes estilos de juego, manteniendo siempre una mentalidad ofensiva.

En las primeras rondas, el equipo demostró su fortaleza colectiva, superando a rivales con actuaciones sólidas en todas las líneas. Los mediocampistas fueron clave para controlar el ritmo de los partidos, mientras que los delanteros aprovecharon las oportunidades para marcar diferencias en el marcador.

El desempeño del equipo llevó al Real Madrid Amateur hasta la final de la competición, donde enfrentaron a un oponente de alto nivel. A pesar de la intensidad del partido y los esfuerzos de todos los jugadores, el equipo terminó como subcampeón. Este resultado, lejos de ser una derrota, representó un logro significativo que reafirmó el papel del equipo como una plataforma de desarrollo para futuros talentos del club.

El legado de la temporada 1958-1959

El subcampeonato en la Copa Ramón Triana fue un reflejo del trabajo en equipo y del compromiso de los jugadores y el cuerpo técnico. Esta temporada no solo destacó por los logros en el campo, sino también por el crecimiento individual de los futbolistas, muchos de los cuales continuaron sus trayectorias dentro y fuera del Real Madrid.

La experiencia adquirida en esta competición fortaleció la cantera del club, preparando a los jugadores para los desafíos futuros. El enfoque en el desarrollo integral, tanto técnico como táctico, fue un pilar fundamental que definió el éxito del equipo durante esta etapa.

En resumen, la temporada 1958-1959 del Real Madrid Amateur fue un ejemplo del impacto que una estructura bien organizada puede tener en el desarrollo del talento futbolístico. El subcampeonato en la Copa Ramón Triana sigue siendo un testimonio del potencial y la dedicación de este equipo.